Según información
difundida por RPP, los mineros informales continúan sus protestas en la Plaza
Dos de Mayo, en el Centro de Lima, por cuarto día consecutivo.
Allí duermen
desde el pasado jueves, cuando llegaron a la capital para exigir que el
gobierno atienda sus demandas.
Víctor Valencia,
representante de los mineros, indicó que radicalizarán las protestas, en caso
el gobierno no responda a sus pedidos. “Vamos a estar acá hasta las últimas
consecuencias. El gobierno nos está atropellando el señor Ollanta con su
encargado el señor Daniel Urresti”, manifestó.“Lo único que nos
queda es radicalizar. En nuestras zonas (de origen) ya están radicalizando.
Están tomando carreteras, puentes, que no es nuestro objetivo. Nuestro objetivo
no es perjudicar a la nación peruana, pero nos están empujando a eso”, expresó.
Bajo estas consideraciones, estimamos que sería un craso error de la administración Humala, negociar bajo presión.
Es simplemente inadmisible que se pueda impedir el libre tránsito de personas y vehículos por las carreteras del país. Debe primar el imperio de la ley y la justicia para poder resolver los impases subsistentes entre las partes, pero sin perjudicar los derechos de terceros.